lunes, 26 de marzo de 2007

Melodías y perfumes

Como si alguien hubiese accionado algún contacto de mi memoria, en mis oídos resuenan esas melodías que hacen vibrar cada fibra de mi ser; esas melodías que me hacen sonreir al recordar todas las personas importantes de mi vida; esas melodías que destacan en mis recuerdos y que al escucharlas me arrancan del presente para volver a vivir aquellos momentos; ésas que también me recuerdan brazos que ya no volveré a sentir o labios que aún me dan las buenas noches como hicieron desde el principio...

Nunca me ha gustado el silencio y ahora parece que todo a mi alrededor se ha aliado para que cada vez que lo rompa me invadan cientos de sensaciones que me abruman. Esas canciones que suenan a mi alrededor, tan pronto me invitan a hinchar mis pulmones y seguir caminando como me comprimen el corazón y humedecen mis ojos.

La asociación de canciones y personas que han hecho tanto mi cabecita como mi corazón me asombra cada día más: escucho la radio durante 8 horas, y a veces, cuando estoy concentrada en la conducción, descubro que la canción que suena me recuerda a una persona concreta en la que ya ni siquiera pensaba.

Una asociación más que ha hecho mi mente, de la que yo ni siquiera me había percatado, es la de perfumes y personas. Cuando salgo a la calle caminando, a veces me doy cuenta de que he girado sobre mí misma buscando una persona conocida al percibir la estela que ha dejado la fragancia de alguien que ha pasado por ahí antes que yo.

¿Tantos años con mi cuerpo y aún me depara más sorpresas?

No hay comentarios: